Al final, el 12º Congreso del PSOE-A se ha reducido en un duelo entre empleadores. ¿Quién ha ganado? Griñán, sin duda, que se ha convertido en secretario general (71 % de los votos) y ha conseguido sacar adelante su ejecutiva (66 % de los votos). Los críticos se han visto apartados, pero mantienen algunos feudos intactos desde los que pueden esperar y ver lo que sucede, prestos a iniciar la reconquista del poder.
Jaén, la provincia de Zarrías, el eterno urdidor, ha rechazado la lista oficial. ¿Por qué? Francisco Reyes, el secretario general, es el presidente de la Diputación Provincial: allí hay demasiados despachos que llenar, plazas de asesor, de secretario, de adjunto, de auxiliar. Acaba resultando cómico que Jaén sea la única provincia que se mantiene fiel a Rubalcaba porque hay muchos empleos en juego en la Diputación. Los delegados traidores podían encontrarse en la calle. Y Ruba quería hacer desaparecer las diputaciones provinciales...
