Hoy se unen las dos columnas de mineros que venían acercándose a Madrid. Supongo que en el interior de la ciudad se sumará una tercera o quinta columna. No lo sé. Poco a poco, los mineros se han vuelto más y más violentos en defensa de sus privilegios. Sus líderes han comenzado a recordar 1934. Incluso hace unos días se denunció que el ministerio de la Guerra había desplegado soldados en el valle del Nalón. Creo que las autoridades del Protectorado se están preparando para enviar a los legionarios, y han comenzado a reclutar mercenarios rifeños. ¡Todo esto es ridículo!
Ayer, me sorprendí cuando vi que mucha gente animaba a los mineros. ¿No saben acaso que lo único que están defendiendo son unos privilegios vergonzosos? Cinco millones de parados, cientos de miles de desahuciados, jubilados obligados a pagar las medicinas, empleados públicos a los que se les rebaja el sueldo... ¿Y qué quieren los mineros? Su derecho a jubilarse a los 42 años cobrando 1.800 euros al mes.
